domingo, 26 de septiembre de 2010

La vida es sueño


Es verdad; pues reprimimos
esta fiera condición,
esta furia, esta ambición,
por si alguna vez soñamos; 

y si haremos, pues estamos
en mundo tan singular,
que
el vivir sólo es soñar;
y la experiencia me enseña
que el hombre que vive, 
sueña lo que es, hasta despertar. 
Sueña el rey que es rey,
y vive con ese engaño mandando,
disponiendo y gobernando;
y este aplauso, que recibe prestado,
en el viento escribe;
y en cenizas le convierte la muerte,
¡desdicha fuerte!

¿Qué hay quien intente reinar,
viendo que ha de despertar
en el sueño de la muerte? 

Sueña el rico en su riqueza,
que más cuidados le ofrece;
sueña el pobre que padece
su miseria y su pobreza;
sueña el que a medrar empieza,
sueña el que afana y pretende,
sueña el que agravia y ofende,
y en el mundo, en conclusión,

todos sueñan lo que son.
Yo sueño que estoy aquí
destas prisiones cargado,
y soñé que en otro estado
más lisonjero, me vi.
¿Qué es la vida?, un frenesí;
¿qué es la vida?, una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.